El viernes por la tarde se realizó la audiencia de control de detención de Renzo Anconetani (33), sindicado como autor del crimen de su madre, Mónica Irene Dagotto (61), quien fue encontrada sin vida el jueves en su domicilio de calle Del Trabajo al 2.614 del barrio Juan XXIII.
La audiencia estuvo presidida por la jueza penal Raquel Tassello; por la fiscalía estuvieron Cecilia Codina, fiscal general y María Belén De la Canal, funcionaria de fiscalía; la defensa de Anconetani fue a través de Gustavo Oyarzún, abogado de la Defensa Pública.
Si bien se trataba de una audiencia pública, por pedido del defensor los medios presentes no pudieron efectuar filmaciones ni grabaciones, así como se restringió el uso de teléfonos celulares.
Desde la fiscalía relataron el hecho que tuvo lugar entre el 16 y 20 de mayo del corriente año, en el domicilio que compartían Anconetani y la víctima, horario sin determinar cuando la mujer se encontraba acostada en su cama, y Anconetani, con claras intenciones de dar muerte le provocó un corte en la cara anterior del cuello, seccionando la tráquea, posteriormente le colocó una almohada en la cara y se retiró de la habitación.
El jueves pasado un conocido del victimario se acerca a la vivienda percibiendo un olor putrefacto y advirtiendo que el hombre manifestaba deseos de terminar con su vida, indicando “yo la maté, no sé cómo hice, la maté”. Por ello el visitante tomó la llave del domicilio y se dirigió a la Seccional Quinta para informar sobre la situación.
Los policías encontraron a Anconetani sentado en un colchón y a su lado el cuchillo de 34 centímetros que sería el arma homicida. Posteriormente hallaron el cuerpo de la víctima que tras la autopsia forense se determinó que llevaba de 3 a 7 días de fallecida.
A partir de ello se decidió declarar legal la detención, la apertura de investigación por el delito de homicidio agravado por el vínculo en carácter de autor para Anconetani, el plazo de investigación por seis meses y la solicitud de la prisión preventiva por 2 meses por el peligro de fuga y entorpecimiento, al tenerlo como probable autor del hecho y la pena en expectativa que es de prisión perpetua, pero con la salvedad de que permanezca internado en Salud Mental hasta que le den el alta y pueda concurrir a un centro de detención.
Por su parte, el defensor no se opuso a ninguno de los planteos pero hizo observaciones en cada uno de ellos, especialmente sobre los relatos que indicarían cuestiones que se presuponen. Sí adhirió a la petición de la fiscalía de que la prisión preventiva sea cumplimentada por el momento en el área de Salud Mental del Hospital con custodia policial y una vez recibida el alta sea trasladado a un centro de detención adecuado donde no haya altos niveles de conflictividad.
La jueza determinó declarar legal la detención, autorizar la apertura de investigación por el delito de homicidio agravado por el vínculo contra Anconetani, y dictar la prisión preventiva por 2 meses, siendo internado en el área de Salud Mental del Hospital Regional, con custodia policial permanente. Debiendo informarse mensualmente su evolución y en caso de cambiar circunstancias se fijará una nueva audiencia.