Este año, la compraventa de inmuebles viene mostrando números que entusiasman a las inmobiliarias. El volumen de operaciones está en alza: en julio, último dato disponible, la firma de escrituras subió 47,3% frente al año pasado en la Ciudad de Buenos Aires y 16,4% en el ámbito bonaerense.
Sin embargo, hay determinadas viviendas que se permanecen más tiempo con el cartel de venta y otras que consiguen rápidamente comprador. En el primer semestre del año, lo que más se vendió fueron las unidades de tres ambientes, que representaron el 28% del total de operaciones. El segmento de los dos ambientes concentró el 25% de las transacciones y le siguió el de cuatro ambientes, con el 24%.
Los inmuebles más chicos (monoambientes) y los más grandes (cinco ambientes o más) resultaron los menos demandados, según un informe el Relevamiento de Operaciones Inmobiliarias (ROI) en el que participan las principales inmobiliarias.
Entre los datos relevados se detectó que en promedio los monoambientes vendidos tienen 35 metros cuadrados (m2) totales; los dos ambientes, 48 m2; los tres ambientes, 82 m2 y los cuatro ambientes, 127 m2 (incluyendo los metros descubiertos).
Además, pudo conjeturarse que el 67% de las ventas fueron de unidades sin cochera; que los departamentos al frente fueron elegidos por el 60% y que el 64% de los departamentos vendidos tienen balcón.
También el sondeo encontró que el 80% de las ventas se dio en unidades ubicadas en edificios sin amenities; que un 16% de los departamentos vendidos tenían una vista única y que el 10% se encontraba en edificios torre.
El «regateo» y el apuro por vender
A medida que se van aceitando las ventas, otro ingrediente que va cambiando son los porcentajes de negociación entre vendedores y compradores (contraofertas). Durante el segundo trimestre de 2024, fue de 7% en promedio respecto del valor de publicación: cayó 1,7 puntos respecto del mismo trimestre de 2023 y 0,4 respecto del primer trimestre. «Después de 5 años, el regateo convergió finalmente al mismo valor que durante el primer trimestre de 2019», según el ROI.
Otro dato que monitorea el relevamiento es el apuro del vendedor para realizar la operación. “El porcentaje de personas que deben vender con cierto apuro fue aumentando con los años; sin embargo, en 2024 representó un 14%, un porcentaje mucho menor que los últimos 3 años. Los datos del primer semestre del año muestran una fuerte caída en el apuro en la venta de los propietarios, convergiendo a los valores del año 2019″, detalló el sondeo.
¿Cuál es el perfil de los clientes que compran inmuebles? Quienes compran para hacer una inversión representan el 12% de las ventas en lo que va del 2024. El resto de las compras se realizaron con el fin de vivienda para uso personal. El inversor se inclina por los dos ambientes y también por los monoambientes. En su mayoría, en edificios sin amenities y sin cochera.
Finalmente, otro rasgo que predominó en las operaciones en el primer semestre fue el “encadenamiento de operaciones”, que sigue siendo alto: más de un tercio de los vendedores de inmuebles tuvo que vender su casa para poder comprar otra propiedad.
NE