«Juntos por el Cambio, tal como se lo conocía, no existe más. Está en proceso de transformación y hay que darle tiempo a ver cómo decanta», asegura un senador electo de la coalición que tendrá mucho peso en el nuevo Congreso.
Así explica por qué el PRO, la UCR y la Coalición Cívica priorizaron la unidad de sus partidos y decidieron no conformar -por ahora- un interbloque en el Senado ni en Diputados. «Eso no significa que no estemos en constante diálogo y coordinación», aclaran.
Incluso recuerdan que en Diputados ya no había jefe de interbloque desde 2021. Después de que el bloque radical se partió en dos no lograron encontrar una figura de consenso que fuera avalada por los distintos bloques. El interbloque se mantuvo con una conducción colegiada entre los jefes de las bancadas más numerosas.
En el Senado, el radical Alfredo Cornejo era el jefe de Interbloque de JxC. En la sesión de este jueves renunció para asumir como gobernador de Mendoza.
Ahora la clave, coinciden en ambas cámaras, será esperar a ver cómo se comporta cada grupo frente al gobierno de Javier Milei. Sobre todo, considerando que hay sectores que sumaron dirigentes al gabinete del libertario, aunque plantean que es «a título personal».
Sin embargo, creen que el panorama no quedará claro en lo inmediato, sino que llevará tiempo. Todavía no conocen el paquete de reformas que planea Milei pero la gran mayoría coincide en que en las primeras medidas -«salvo que haya una barbaridad»- van a mostrar acompañamiento. Sobre todo, porque ese fue el mandato popular y no quieren ser quienes ponen palos en la rueda.
Lo cierto es que mantener la unidad de los bloques partidarios ya significó un desafío en sí mismo. Hubo rupturas, reconciliaciones, amenazas y algunas bancadas quedaron «atadas con alambre».
«JxC está bastante partido y se sostiene por buena voluntad. De ahí a que finjamos demencia y pongamos a alguien que no representa a todos… Es muy forzado», sintetiza con sinceridad brutal una legisladora clave.
Igualmente hay sectores de la Cámara alta que creen que lo mejor es que el interbloque se constituya. Tal vez con otros socios e incluso con otro nombre, pero aseguran que es el deseo de un sector importante y que es lo más conveniente para no licuarse.
Cómo quedaron los bloques y quiénes los presiden
Antes de la sesión de jura hubo varias reuniones en simultáneo de las que surgieron anuncios: el cordobés Luis Juez será el jefe de bloque del PRO en la Cámara Alta que tiene 7 senadores. Sucederá a Humberto Schiavoni y estará secundado por entrerriano Alfredo De Angeli.
El bloque de la UCR, de 13 legisladores, ya había designado con envión del gobernador correntino Gustavo Valdés a Eduardo Vischi, que reemplazará al formoseño Luis Naidenoff que dejó el Congreso después de 18 años como legislador.
Mientras tanto, los aliados Lucila Crexell, y Juan Carlos Romero se quedaron en una bancada propia y sumaron a las chubutenses Andrea Cristina y Edith Terenzi.
En Diputados, después de partirse en dos bloques, la UCR recapacitó y tras largas negociaciones confluyó en una sola bancada de 35 legisladores, que preside Rodrigo De Loredo.
El Frente PRO quedó unido presidido por Cristian Ritondo con 40 bancas propias.
Mientras Miguel Angel Pichetto armó una bancada propia, a la que llamó «Cambio Federal», y reune 9 voluntades. Entre ellos a Ricardo López Murphy, Margarita Stolbizer, Nicolás Massot, y legisladores de gobernadores.
La Coalición Cívica quedó con 6 diputados y Juan López mantuvo la presidencia.