El veranito cambiario parece haber llegado a su fin, de la mano del dólar contado con liqui que se consolida por encima de los $ 1.000.
Este jueves repuntó 3,6% y llegó a $ 1.086, lo que implica un salto de 11,7% en las tres ruedas que transcurrieron del 2024. También subió el MEP, que ya cotiza a $ 1.050, mientras el blue se vendió a $ 1.020.
Con esto la brecha cambiaria vuelve a estirarse a 34% y así más que duplica el registro que había mostrado hace menos de un mes cuando se había reducido al 15%.
Si bien el alza de la brecha es marcada, sigue estando muy lejos del 210% había tocado en octubre, en medio de la incertidumbre electoral y cuando Javier Milei aún esgrimía su proyecto dolarizador.
En lo que va de esta semana se aceleró el proceso de recuperación de los dólares alternativos, que hasta hace unos días el mercado esperaba recién para la segunda quincena de enero, cuando empezaría a secarse la demanda fuerte de pesos propia del fin de año y el arranque de las vacaciones.
El contado con liqui (CCL) se despertó en medio del ruido que genera la inflación viajando al 30% mensual mientras el dólar oficial se reacomoda apenas 2%. No fue el único: además del alza del MEP, que avanzó esta semana 5,6%, empieza a haber incrementos en el dólar futuro. La cotización para marzo se reacomodó este jueves a $ 1.042, un salto del 4,3% en el día.
Pese a las promesas del Gobierno, el acceso al dólar oficial, hoy en $ 811,7 a nivel mayorista, sigue estando restringido. Y aunque el Banco Central va recomponiendo las reservas a través de las compras en el Mercado Unico y Libre de Cambios (MULC) no está claro cuando se desarmará ese eslabón del cepo.
En esta rueda. El Central compró US$ 211 millones y ya acumula US$ 3.304 millones desde la devaluación de diciembre. Con esto, las reservas netas que habían llegado a ser negativas en casi US$ 12.000 millones, ahora recortaron a – US$ 8.939 millones, según la estimación de Aurum Valores.
El resultado es que al no poder acceder al dólar oficial crece la demanda de las empresas sobre el contado con liqui en momentos en que la oferta en este segmento empieza a contraerse.
Desde Portfolio Personal Inversiones (PPI) marcan que el volumen operado en dólar spot en Mercado Abierto Electrónico (MAE) -que sirve como indicador de la liquidación de los exportadores en el MULC- «se desaceleró notablemente en los primeros dos días de 2024. La contracara de esto es que se estaría canalizando una menor oferta hacia el CCL».
El esquema vigente en el Programa de Incremento Exportador obliga a liquidar 80% en el MULC y el 20% en el CCL. El miércoles, el volumen operado en el spot se hundió a US$ 256 millones, el segundo monto más bajo desde la devaluación, desde US$ 338 millones promedio en las dos semanas previas.
Así, lo liquidado en el CCL recortó a US$ 64 millones desde US$ 98 millones diarios en promedio en las dos semanas anteriores.
Por el lado de la demanda, «los inversores tienen incentivos a comprar dólar MEP siempre que se ubique por debajo del dólar tarjeta (oficial + 60% de impuestos), que ronda en $ 1.300. Dicho de otra manera, hay incentivos para arbitrar ambas cotizaciones, lo que a su vez ejerce una presión al alza sobre el CCL que arbitra contra el MEP».
Tanto el MEP como el CCL deberían trepar 25,4% y 24,2% para igualarse al dólar tarjeta, por lo que «podrían tener recorrido al alza. Entendemos que, como el esquema cambiario se planteó de esta forma desde el principio de la gestión Milei, el equipo económico toleraría una brecha duplicándose a 60%«, marca PPI.
En simultáneo, las expectativas positivas que coparon al mercado en diciembre «podrían deteriorarse ante las trabas que el gobierno enfrentaría para llevar a cabo las reformas propuestas en el DNU y la Ley Ómnibus, lo que podría derivar en una caída más profunda de la demanda de pesos, que ya se ubica en mínimos históricos», señala PPI.