Gran Hermano se cansó y sancionó a los jugadores: «Mi paciencia tiene un límite»

La tensión dentro de la casa de Gran Hermano volvió a escalar este domingo, cuando la voz del dueño del juego irrumpió con un fuerte mensaje a los jugadores. Una vez más, el ojo que todo lo ve dejó en claro su malestar por las reiteradas faltas al reglamento por parte de los hermanitos y que impiden el normal desarrollo del reality.

La advertencia no tardó en llegar y fue contundente desde el inicio: «A cada rato ustedes se empecinan en poner a prueba mi paciencia. Quizás es solo por distracción o negligencia que reinciden en ciertas infracciones. Me gustaría creer que no lo hacen deliberadamente para obtener alguna ventaja, pero hay conductas muy sugestivas que no hacen más que fomentar mis sospechas», comenzó diciendo Big.

El motivo de esta nueva sanción tuvo que ver con los reiterados episodios relacionados a los “gritos del afuera”, una problemática que viene generando conflictos desde hace varias semanas. Según explicó la voz de Gran Hermano, los jugadores no solo no respetan el protocolo establecido, sino que además, en algunos casos, parecen actuar con intención.

«Además, me canso de decir siempre lo mismo lo cual me genera mucha incomodidad, les soy sincero. Pero quienes se ponen en problemas son ustedes. Otra vez incurrieron en faltas graves con relación al protocolo que rige sobre los gritos del afuera. Por ejemplo: se escucha un grito en el jardín y se producen demoras llamativas en el ingreso a la casa, o en ocasiones si están adentro se apresuran a salir para escuchar el mensaje», detalló, marcando con claridad la gravedad de las acciones observadas.

A si vez, manifestó: «Es una pena que en esta instancia de la competencia sigan con fuego», expresó, haciendo alusión al poco margen que queda en una etapa definitoria del juego.

A continuación, anunció la sanción que alcanzará a todos por igual: «Como fueron muchos los jugadores que volvieron a transgredir el protocolo, el castigo será para todo el grupo. He decidido lo siguiente: les descontaré la mitad del presupuesto para la compra de esta semana. Si ganan la prueba tendrán el 50 por ciento, si la pierden, nada más el 25» «Como fueron muchos los jugadores que volvieron a transgredir el protocolo, el castigo será para todo el grupo. He decidido lo siguiente: les descontaré la mitad del presupuesto para la compra de esta semana. Si ganan la prueba tendrán el 50 por ciento, si la pierden, nada más el 25».

Antes de darle un cierre a su mensaje, la voz de Gran Hermano dejó una advertencia directa, sin margen de interpretación: «Mi paciencia tiene un límite». La frase, dicha con tono firme y seco, dejó a los jugadores en silencio, visiblemente afectados.