Comprar un celular usado puede ahorrarte miles de pesos, pero es una decisión que requiere precaución, investigación y un ojo agudo. Con el auge de las ventas de dispositivos reacondicionados y de segunda mano en todo el mundo, los consumidores necesitan sortear los riesgos ocultos, desde el soporte de software vencido hasta el hardware falsificado.
Cambiar de celular a menudo puede ser un hábito costoso, especialmente considerando que los mejores celulares Android pueden costar más de 2 millones de pesos. Las opciones de celular de gama media se han vuelto mucho más accesibles en estos días, pero otra excelente manera de obtener una buena oferta es comprando un celular usado.
«Usado» es una palabra que está cargada de connotaciones negativas. Sin embargo, comprar un celular usado no tiene por qué ser una mala experiencia. De todos modos, incluso si hacés la debida diligencia al comprar un celular o tableta usados, las cosas aún pueden salir mal.
Hay muchos pasos que podés tomar para reducir la probabilidad de un incidente desagradable, y un plan de respaldo nunca está de más en caso de que tengas problemas. Los siguientes consejos deberían ayudarte a través del proceso de obtener un celular sólido y usado. Si bien se escribieron principalmente pensando en los celulares, la mayoría de estos pasos también deberían aplicarse a muchos otros productos.
Lo que debés hacer: paso a paso para comprar seguro un celular usado
Investigá al vendedor a fondo
Siempre prioriza a los vendedores de buena reputación. Los minoristas establecidos, los reacondicionadores certificados y las plataformas con programas de protección del comprador ofrecen garantías y políticas de devolución, salvaguardas fundamentales contra dispositivos defectuosos.
Consultá las reseñas acerca de los vendedores, solicitá un comprobante de compra y evitá las ofertas que parecen demasiado buenas para ser verdad. Un vendedor confiable proporcionará un historial detallado del dispositivo, incluidos los registros de reparación y los accesorios originales.
Inspeccioná el estado físico del celular
Comenzá con un examen práctico:
- Pantalla: Ajustá el brillo al 100 % para detectar rayones o píxeles muertos.
- Cuerpo: Verificá si tiene abolladuras, tornillos que no coinciden (signos de reparaciones) o componentes sueltos.
- Puertos: Probá el puerto de carga y el conector para auriculares con tus propios cables.
Verificá el IMEI y los números de serie del celular
El número de identidad internacional de un equipo móvil (IMEI, sigla en inglés) es tu primera línea de defensa contra dispositivos robados o incluidos en la lista negra:
- Marcá *#06# para ver el IMEI.
- Comprobálo con bases de datos en línea como IMEI.info o el sitio web del fabricante.
- Aseguráte de que coincida con el número de la caja original (si está disponible).
Nunca te saltes la comprobación del IMEI: es la forma más fácil de evitar comprar un celular inutilizable.
Probá todas las funciones del celular
No te limites a mirar la pantalla de inicio. Poné a prueba el celular:
- Botones: Los botones de encendido, volumen e inicio deberían responder al instante.
- Cámaras: Cambiá entre las lentes delanteras y traseras; buscá borrosidad o problemas de enfoque.
- Sensores: Cubrí el sensor de proximidad durante una llamada para ver si la pantalla se apaga.
- Altavoces/micrófonos: Reproducí audio y grabá una nota de voz.
Para los usuarios de Android, ejecuta *#0*# para acceder a los diagnósticos integrados.
Comprobá el estado de la batería del celular
Una batería degradada arruina la experiencia. A continuación, te indicamos cómo evaluarla:
- iPhone: Debés ir a Configuración > Batería > Estado de la batería. Intentá que tenga al menos un 80 % de capacidad.
- Android: Usá aplicaciones como AccuBattery o marcá *#*#4636#*#* para obtener estadísticas básicas.
Si la batería se agota a los pocos minutos de desconectar el dispositivo, alejáte.
Confirmá la compatibilidad del software
Los modelos más antiguos pueden carecer de actualizaciones importantes:
- iPhone: Apple suele ofrecer soporte técnico para los dispositivos durante 5 a 7 años.
- Android: Los modelos insignia reciben actualizaciones durante 3 a 4 años; los celulares económicos suelen tener menos. La línea Galaxy S de Samsung se destaca porque ofrece para su flamante serie S25 siete años de actualizaciones.
Evitá los celulares que tienen versiones desactualizadas del sistema operativo, ya que son vulnerables a las brechas de seguridad.
Lo que no debés hacer: errores comunes a evitar
No te saltes el recibo
¿El vendedor no tiene comprobante de la compra? No hay trato. Los recibos validan la propiedad y ayudan a resolver disputas. Insistí en un acuerdo escrito para ventas privadas, incluso si es informal.
No ignores los costos de reemplazo de batería del celular
Un celular con un 70% de vida útil de la batería podría necesitar un reemplazo. Debés tener esto en cuenta en tu presupuesto o negociá un precio más bajo.
No comprés sin probar la red
Aseguráte de que el celular funcione con tu operador:
- Bloqueado o desbloqueado: Los dispositivos bloqueados por el operador restringen el uso de la tarjeta SIM. Preguntále directamente al vendedor.
- Compatibilidad con 5G: Los modelos más antiguos pueden carecer de bandas modernas, lo que reduce la velocidad de los datos.
No pases por alto los daños causados por el agua
Comprobá si hay corrosión oculta:
- Retirá la bandeja de la tarjeta SIM y buscá manchas de humedad blanca o roja.
- Utilizá aplicaciones como Phone Doctor Plus para probar los sensores internos.
No caiga en estafas de «como nuevo»
Debés tener cuidado con los vendedores que usan términos como «en perfecto estado» sin fotos. Solicitá fotografías en primeros planos de las esquinas, los puertos y las pantallas. Las videollamadas pueden ayudar a verificar el estado del dispositivo antes del envío.
Dónde comprar: plataformas de confianza frente a plataformas riesgosas
- Reacondicionadores certificados: ofrecen garantías, dispositivos probados y la alternativa de devoluciones, aunque tienen precios más altos.
- Mercado Libre y plazas de comercio electrónico similares: tienen una amplia selección y precios competitivos, pero siempre está el riesgo de una estafa y hay vendedores que no ofrecen ningún tipo de garantía.
- Vendedores en redes sociales: encontrarás posibles gangas, pero tienen un alto riesgo de fraude y no ofrecen ninguna protección al comprador.
Lista de verificación final antes de pagar por un celular usado
- IMEI verificado.
- Estado de la batería ≥80%.
- Todos los botones y sensores funcionan.
- Sin grietas ni rayones importantes.
- Incluye cargador y accesorios.
- Garantía o política de devolución.
Comprar un celular usado exige diligencia, pero las recompensas valen la pena: pensá en funciones destacadas a la mitad del precio. Al combinar inspecciones exhaustivas con hábitos de compra inteligentes, evitarás los obstáculos y obtendrás un celular que se siente como nuevo. A medida que crece el mercado de segunda mano, los compradores informados son los que realmente ganan.