Martín Napal apuñaló a su expareja cuando estaba embarazada y el bebé murió. En la cárcel, terminó sus estudios e hizo cursos de estímulo educativo para acceder antes a salidas transitorias. Un tribunal entendió que sí eran válidos los de corte y confección y peluquería; no así los destinados a microemprendedores.
En una resolución emitida por el tribunal revisor de Río Mayo, compuesto por los jueces Ariel Quiroga, Fabio Monti y Javier Allende, se determinó la revocación parcial de la decisión del juez de ejecución penal, Alejandro Rosales, respecto de los estímulos educativos solicitados por Martín Napal.
El reo cumple una pena de 13 años y 6 meses de prisión por homicidio doblemente agravado y había realizado varios cursos en 2019 que ahora fueron validados por los magistrados.
En la revisión, los jueces aprobaron los cursos de corte y confección, así como de peluquería para hombres, pero no aceptaron los de economía para emprendedores. La defensora pública, Rosa Sánchez, había argumentado que los cursos cumplían con los requisitos para ser considerados estímulos educativos.
Además, Sánchez destacó que Napal completó sus estudios primarios y secundarios dentro del programa de Educación Permanente para Jóvenes y Adultos del Ministerio de Educación de Chubut.
Por su parte, la procuradora fiscal Luciana Coppini y el funcionario Matías Ayuzo coincidieron con la defensa en la importancia de reconocer estos cursos como parte de los estímulos educativos, especialmente porque contribuyen a la reinserción laboral del condenado.
Este fallo se produce en el marco de una revisión de la pena impuesta a Napal por un intento de homicidio de su expareja, con agravantes por la relación de pareja y la alevosía en el ataque. El hecho ocurrió en mayo de 2018 en Río Mayo y un año después llegó la condena para Napal.