La salud pulmonar es un aspecto fundamental del bienestar general, especialmente en un mundo donde la contaminación ambiental, el tabaquismo y otras sustancias irritantes pueden afectar el sistema respiratorio. En este contexto, la alimentación juega un papel clave en la protección y regeneración de los pulmones. Según la nutricionista María Teresa Zumarán, de la Clínica Ricardo Palma, el consumo de ciertos alimentos con propiedades antioxidantes y depurativas puede ayudar a limpiar los pulmones y mejorar su funcionamiento.
Zumarán recomienda incorporar cinco veces al día alimentos con nutrientes relajantes, como los frutos secos, la piña, el plátano y la avena con leche. Además, enfatiza la importancia de mantenerse bien hidratado, sugiriendo el consumo de al menos dos litros de agua al día para favorecer la eliminación de toxinas a través de la orina. También insta a tomar jugos de verduras y frutas diuréticas como el apio, la borraja, la lechuga, el espárrago, el ajo y la cebolla, así como la pera y la manzana. Complementariamente, infusiones como la cola de caballo, el diente de león y la menta pueden actuar como desintoxicantes pulmonares.
Investigaciones recientes han demostrado que los flavonoides presentes en los zumos de frutas cítricas pueden proteger las células pulmonares del daño oxidativo. Un estudio titulado La fracción flavonoide de los jugos de naranja y bergamota protege las células epiteliales del pulmón humano del estrés oxidativo inducido por el peróxido de hidrógeno analizó el efecto de estos compuestos en células pulmonares. Los resultados revelaron que los extractos de jugo de naranja y bergamota disminuyen la producción de especies reactivas de oxígeno, optimizan la función de las mitocondrias y previenen el daño oxidativo del ADN.
Según esta investigación, el consumo de flavonoides presentes en frutas cítricas podría ser clave en la prevención de enfermedades pulmonares crónicas como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), el asma y el síndrome de dificultad respiratoria del adulto (SDRA). Estas afecciones están estrechamente relacionadas con la exposición a contaminantes ambientales y la producción excesiva de radicales libres en el sistema respiratorio.
El sistema respiratorio es especialmente vulnerable al estrés oxidativo debido a la presencia de contaminantes en el aire y al humo del tabaco. La acumulación excesiva de radicales libres, como las especies reactivas de oxígeno (ROS), está directamente asociada con la inflamación pulmonar y el deterioro progresivo de la función respiratoria.
Diversos estudios han señalado que los flavonoides pueden ayudar a reducir el daño causado por la oxidación en el organismo. Según un artículo publicado en Evidence-Based Complementary and Alternative Medicine, estos compuestos podrían proteger contra el daño oxidativo en enfermedades pulmonares. Sus beneficios incluyen la capacidad de combatir moléculas dañinas, influir en la actividad de ciertos genes y fortalecer las defensas antioxidantes de las células.
Las naranjas, además de ser ricas en flavonoides, contienen vitamina C, un antioxidante esencial para la salud pulmonar. Su consumo regular ha sido asociado con una mejor defensa del sistema respiratorio y con la reducción de síntomas como la tos matutina y la tos crónica en fumadores.